Algo está cambiando en la industria multinivel. Y lo está haciendo de manera global. Ya no sólo porque las nuevas tecnologías nos permiten contactar con personas de todo el mundo y extender nuestra red en cualquier continente -cosa impensable hace años cuando se iniciaron los primeros negocios de Network Marketing-, sino también porque esta industria se atreve ya a comercializar cualquier producto, los profesionales que la desarrollan ya no son locos visionarios y el sistema de retribución ha evolucionado tanto que en algunos negocios ni siquiera es necesario formar una red para obtener ingresos. Pero vayamos por partes.
¿Qué ha pasado con los productos? El multinivel comenzó comercializando productos cosméticos, de salud o limpieza. Sin embargo hoy en día podríamos comprar casi de todo empleando productos comercializados por empresas multinivel. Estamos hablando de tecnología, tarjetas de crédito, oro, bisutería, lencería, zapatos, juegos, alimentación… Cualquier cosa que podamos imaginar es susceptible de ser recomendado y vendido por un distribuidor que no necesita tienda física.
¿Quiénes son los nuevos profesionales del multinivel? Recordemos aquellos locos que hasta hace bien poco se enfrentaban a casi el escarnio público por creer que podía existir una forma de ganarse bien la vida sin tener que tener un jefe que le marcara los tiempos y confiaban en reclutar a otros que también pudieran creer en lo mismo. O a esa ama de casa que vendiendo pintalabios o cremas conseguía un dinerillo para sus caprichos. Ahora, y quizá porque la crisis nos lleva a probar cosas nuevas sin tener nada que perder o también porque los negocios multinivel actuales han demostrado una seriedad que lleva a confiar cada vez más en esta industria o porque empresas y marcas que trabajaban la comercialización tradicional se han pasado a la distribución multinivel, lo cierto es que se han sumado a formar parte de esta industria profesionales liberales, funcionarios, autónomos o empresarios que movidos por la insatisfacción en sus trabajos, o habiéndose quedado sin ellos, optan por probar nuevas fórmulas para conseguir ya no sólo ingresos extra –como hace unos años- sino también como única fuente de ingresos. De esta forma el pertenecer a una empresa multinivel ya no es algo marginal y mal visto sino que se está convirtiendo en algo habitual, reconocido, respetado y casi envidiado.
¿Cuáles son los cambios que han revolucionado los planes de compensación? En el Día 2 de mi Curso Básico de Network Marketing que os regalo al suscribiros a este blog he tenido la oportunidad de hablaros de las distintas fórmulas de retribución más habituales empleadas a lo largo de la historia del multinivel, sin embargo ahora estos planes han evolucionado y contemplan desde bonos generados en función de los distribuidores que forman toda la línea mundial del negocio –algo con un potencial muy importante- hasta la posibilidad de trabajar sin hacer red obteniendo ingresos por realizar un trabajo diario. Parémonos un segundo en esto último que he mencionado: los negocios que te dan la opción de invertir una pequeña cantidad de dinero -o incluso ni eso- y generar ingresos a cambio de una actividad diaria que te lleva muy poco tiempo. Estoy hablando de negocios basados en ganancias compartidas como Unetenet, Telexfree, WCM77, Lucrazon, etc. Estas empresas te dan la oportunidad de que a cambio del tiempo que inviertas poniendo anuncios o post que promocionen alguna de las empresas asociadas y en función de tu inversión inicial consigas cada mes unos ingresos. Las ganancias compartidas no es algo exclusivo del multinivel, ni mucho menos, es algo cada vez más habitual en las empresas que optan por convertir la nómina de toda la vida en una parte fija y otra variable que se repartirá entre todos y que estará determinada por el volumen de ganancias de la empresa. La novedad en esta fórmula en el multinivel es que no es necesario hacer una red de distribución, piedra angular de esta industria, sino que te da la posibilidad de que no la hagas. Evidentemente sin ampliar tu línea de distribución nunca tendrás ingresos importantes pero también es cierto que el trabajo que te requieren no lleva mucho tiempo y como ingreso extra puede estar bien.
Todos estos cambios que hemos señalado hacen que los profesionales del multinivel toquen muchos negocios, incluso al mismo tiempo. Las personas esperan ingresos rápidos y, por lo general, estas empresas no los ofrecen sino que es necesario trabajar en profundidad y formar un potente equipo para que el dinero empiece a fluir con alegría y empecemos a ver la tan ansiada libertad financiera. Así que muchas personas que habían apostado por esta industria se quedan por el camino y sienten que han fracasado. Algunos de ellos abandonarán el multinivel para siempre y otros, que vieron el potencial, intentarán mejor suerte en otros negocios de la industria. No es raro, por tanto, trabajar en una empresa en la que confías pero cuyo éxito te llegará en el medio-largo plazo y mientras obtener ingresos rápidos en otros negocios que se auguran de menor recorrido por el producto o su distribución pero que te aportan los ingresos que necesitas. Todo esto conlleva un peligro importante que hay que saber calibrar: el desenfoque.
Desenfocarse intentado llevar hacia adelante varios negocios puede hacer que ninguno te aporte éxito y que todos acaben en fracaso. Esto ocurre igualmente en los negocios tradicionales e, incluso, en la vida cotidiana ¡Cuántas veces habremos oído decir aquello de “quien mucho abarca, poco aprieta”! Pues eso. Yo te animo a que selecciones muy bien el negocio o negocios (dos, tres a lo sumo) en el que quieres estar pero sobre todo el equipo del que quieres formar parte ya que esa será la clave fundamental de tu éxito. Un equipo en el que sentirte acompañado, respaldado y cuidado. Un equipo como el mío